La hora en que no pasa el tiempo, en que ajusto mi horario. Todo es verano contigo, calor y sudor. Sonrisas. Me hermano con Calvino o con Nabokov, con Carroll. Escribimos al mismo tiempo (Calvino, Nabokov, Carroll, tú y yo), en un instante sin sentido, la misma frase, y nos leemos como la primera vez.
No hay pasado. Yo nací el día que te escribí.
|
La joven lectora, Jean-Honoré Fragonard |
No hay comentarios.:
Publicar un comentario