martes, diciembre 06, 2016

Pensar con profundidad - Fernando Pessoa

«Me lleno de ira. Querría comprenderlo todo, saberlo todo, cumplirlo todo, decirlo todo, disfrutarlo todo, sufrirlo todo, sí, sufrirlo todo. Pero no tengo nada de todo esto, nada, nada. Estoy anulado por la idea de lo que querría tener, poder, sentir. Mi vida es un inmenso sueño. Pienso, en ocasiones, que quisiera cometer todos los crímenes, todos los vicios, todas las acciones bellas, nobles, grandes, beber la belleza, la verdad, el bien, de un solo trago, y dormirme después para siempre en el pacífico seno de la Nada.

»Déjenme llorar.

»Estoy aquí sentado, escribiendo en mi mesa, con mi bolígrafo en la mano, etc., y súbitamente cae sobre mí el misterio del universo y me detengo, tiemblo, siento pánico. Siento el deseo de dejar de sentir, de matarme, de aplastar mi cabeza contra la pared.

»Dichoso el hombre que puede pensar con profundidad; sin embargo, sentir con esa profundidad es una maldición. ¿Cómo podría describirlo? Un horror que se añade a otro...»

(Diarios)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario