No sé cómo llegaron pero si están aquí es porque... ya lo saben, o no, y en todo caso no importa a dónde vayan, la cuestión es que comparten conmigo el té, y la condena del tiempo. Me encantan las coincidencias y más las reincidencias, el azar, el reloj que va marcando lo que sentimos. La vida al otro lado del espejo, al otro lado de la red. Les he tocado y me han tocado, digo, por decir, de alguna manera, me hacen sonreír, reír y me han hecho crecer, reducirme según el instante que se queda prendido, prendado, a mi cabeza. No es fácil seguir esta locura, este cambio de sillas y las tazas sucias, pero a quienes están aquí, que caen sin querer en esta madriguera, gracias.
Tengo el tamaño ideal para una oruga de mi edad, y la sonrisa sin cuerpo, y las palabras. Aunque me corten la cabeza.
Nos leemos, espero, en 2010.
Salud.
Un abrazo.
No tienes que darme las gracias, yo no he caido en tu madriguera por azar, vengo porque quiero.
ResponderBorrarNos veremos, claro que sí, muy pronto.
Un abrazo.
Comenzar el año viendo a Alicia y al sombrerero es uno de los mejores augurios para el 2010. Que el conejo siga siendo el guía hacia el pais de las maravillas,y el gato, a la vez que incita a las locuras, nos libre sólo de las extremas, y como la niña de azul que en el despertar haya sonrisas. ¡Felices fotografías! ¿Habrá expo? ¡Feliz Año!
ResponderBorrarBlanch
Gracias por la visita, Mercedes, Blanca, demás invitados al no cumpleaños. Feliz año y veremos qué nos depara el calendario recién estrenado.
ResponderBorrarOjalá haya expo, ya avisaré en este espacio.
Un abrazo.