sábado, noviembre 20, 2010

19:10

miramos el reloj destartalado:
son las 20:10

aunque sin manecillas, sin tic-tac
lo intuimos
apenas ha transcurrido una hora
desde la llamarada

dos
desde que quisimos gritar

las siete pe eme más diez minutos

es la hora
rugidos, surrurros burlones, devociones miserables
lo reclaman
y el murmullo crece

en sesenta acelerados segundos 
alguien trata de desvelar  
lo oscuro y lo encarnado 
uno más habla de propiedad y libertad 
inapropiadamente libre 
otro atrapa al vuelo la moneda 
sin dejar ver si hubiera sido águila 
o sol 

la intención es tierna
mas hoy no queda nada
sino un escudo lleno de gestos
y una guerra sin insignias ni uniformes
(o acaso demasiados)

si el norte fue la cuna o el centro
allá o este en el oeste
qué más da
el tiempo se escurre más rápido
hacia la medianoche

es el pasado
todo ocurrió en segundos

vámonos

han pasado sesenta minutos
y nada ha pasado
sino la electricidad
y nada ha pasado
más que las miradas

No hay comentarios.:

Publicar un comentario