sábado, enero 19, 2008

19 de enero

Y el fragmento que pervive si alguien silba. Es un viento de vasijas rotas y caminos mordisqueados, los cristales donde irrumpe la mirada de las cabras sordas, el mugroso lagrimal de una tortuga en el manchón de aceite.

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Y esa nada a la que apuntan las palabras cuando apuntan: el son del corazón, la luz radiante, la caída libre del silencio encuentra en verso libre su sabor a esquirlas.


Luis Cortés Bargalló, [Fragmentariamente/El aparato],
Filos de un haz y envés, Trilce, colección Tristán Lecoq, México, 2007

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