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domingo, mayo 08, 2016
viernes, mayo 25, 2012
sábado, diciembre 10, 2011
aumento
Aunque a veces peques de miope,
cuando tu pupila se convierte
en la niña de tus ojos
todo se ve de otro color.
Y aunque haya perrillas
felicítate:
que el iris aprecie
todos los colores
que abarca tu visión.
martes, noviembre 17, 2009
viernes, octubre 16, 2009
viernes, marzo 20, 2009
martes, agosto 05, 2008
viernes, marzo 30, 2007
Historias del desencanto, que encantan
Para cerrar el ciclo México lindo se presentó en el Cine Alameda Historias del desencanto (México, 2005), de Alejandro Valle, una opera prima que, para bien o para mal, cocteliza y trata de meter todo lo que le gusta a su director. Lo mismo está en la onda de Narnia que de Mad Max o Corre Lola corre o Drácula de Bram Stoker o El graduado o Matrix o El show de terror de Rocky o La tiendita del horror o Constantine o...
Buena foto, escenas sexuales prendidas pero justificadas, perversiones, pachecadas, sueños, buenas rolas (el maese López y Quijada) y una animación de excelente factura que no le pide nada a la extranjera justifican los diez años que el proyecto tardó en cocinarse en la onda de las nuevas tecnologías. De corto a largometraje es difícil el andar y a no ser por varios videoclips que alentan el ritmo la película se disfruta, aun con los lugares comunes acumulados por el director. Y es que lo común es disfrutable, no se puede descalificar una cinta que los sabe aprovechar.
Y al salir con una sonrisa de la función (por cierto casi vacía) uno no puede menos que preguntarse por qué diablos no se programó en el circuito comercial Historias del desencanto, mientras sigue en cartelera una cosa tan lamentable como Kilómetro 31, ahí sí, un lugar común... que desencanta.
sábado, marzo 24, 2007
el publico dividido de El cielo dividido

En el Cine Teatro Alameda (el único rescatado del ataque de las microsalas) se inició el ciclo México Lindo con "El cielo dividido", película de Julián Hernández, y la carta fuerte fue la presencia del director, que estuvo charlando un rato con quienes salían de la segunda función y los que entrábamos a la tercera.
La única referencia que me habían dado era "es fuerte pero es buena", y convencí a Luz de ir a verla.
Todos los que pidieron el micrófono le dijeron a Julián que les había gustado mucho su película, y nosotros no pudimos participar en la plática por no contar con mayores elementos.
La cinta trata de contar la historia (¿?) de amor entre Gerardo y Jonás, con encuentros, desencuentros y un supuesto nudo producto de un engaño. Secuencias laaargas sobre todo de sexo, pero también todo el camino del personaje por Ciudad Universitaria. Buena fotografía, con textura y tonos. Diálogo casi nulo ("lo bueno es que los cuerpos hablan", dijo el director) y una música que incluye un tema de (el cuñao) Kalimba...
¿Amor? Las miradas de los actores y el todo sexo no me transmitieron esa idea. Para la temática gay lo he visto reflejado con sutileza en la excelente "Quinceañera" (Glatzer y Moreland, 2006) y otras películas (los interesados pueden consultar www.homocine.com), pero el amor va más allá. Tanto sexo en pantalla cansa, y no porque sean escenas gay. Si hubiera sido una pareja heterosexual igual me hubiera cansado. Algo así como "9 songs" (Winterbottom, 2004), que tampoco aguanté completa.
Para ver sólo cuerpos prefiero comprarme una película porno en el tianguis de Las Vías.
Ah, el director dijo en la charla que hizo una película como la que le hubiera gustado ver de niño...
Ya después lei que durante la presentación de El cielo dividido en la Berlinale una parte del público aplaudió a rabiar y otra optó por la graciosa huida ante el aburrimiento que les causó la obra de Hernández.
Vaya, no fuimos los únicos en huir.
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