martes, diciembre 23, 2008

miradas

"Y aprendí, señores míos. Ah, sí, cuando hay que aprender se aprende si se trata de encontrar una salida. Se aprende de forma despiadada. Se controla uno a sí mismo con una fusta, y a la menor debilidad se flagela. Mi estado simiesco salió con violencia fuera de mí y se alejó dando tumbos. Aquello provocó que mi primer adiestrador casi se transformara en mono y pronto tuviera que abandonar las lecciones para ser internado en un sanatorio. […] Sin embargo, desgasté a muchos maestros e, incluso, a varios juntos. Más tarde, estando yo más seguro de mi capacidad, cuando el público captó mis progresos y mi futuro comenzó a sonreirme, yo mismo escogí a mis profesores. Los senté en cinco habitaciones contiguas y con todos aprendí a la vez, saltando sin cesar de un cuarto a otro".

El mono de "Informe para una academia" (1917)
Panchito Kafka

No hay comentarios.:

Publicar un comentario