lunes, septiembre 27, 2021

Ángel Ortuño (1969-2021)

FIL Guadalajara, 2014

DAMITAS, CABALLEROS, AMABLES PASAJEROS: 
HOY LES VENGO A CONTAR —A DEFINIR, DIGAMOS— 
QUÉ HA SIDO SIEMPRE Y SERÁ POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS 
LA POESÍA


Yo me sentía muy listo y por eso
grité
que era indefinible. Había una vez un monstruo
pero no era feo
sino que todo el tiempo era algo más,
se parecía y no
se parecía.
En estas estampitas
lo pueden ver moverse . Ya no hay nada
imposible. Sus gestos
son obscenos, son lindos, son los propios
de una mascota que sufre intoxicación alimentaria. Entonces,
le llamamos cariño o preocupación
a lo que nos une a ella.




CINCO SECRETOS PARA LUCIR 
MÁS VIEJO DE LO QUE SOY


Les decían arrugas pero ahora se llaman
líneas
de
expresión.


Yo mediría seis metros pero ¿sabes?,
tenía 13 años
y unas inmensas ganas de fumar:


los músculos faciales
resintieron el gesto de sentirme James Dean
cuando me parecía en realidad a cierto cuadro
de Francis Bacon
copiado con crayones de cera.


También comí hamburguesas: me he mudado
de casa quince veces
y lo que llevo siempre son
juguetes. Mi postura


es terrible. No han diseñado sillas
que transmitan
mis malas mañas a jóvenes columnas
vertebrales.


Mi consumo excesivo
de alcohol tiene lagunas
mentales con los monstruos que quieren
no robarse a una rubia
sino reír mientras los bordan
a escopetazo limpio.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario