rumores

Todo se dijo, por celular, por teléfono, por correo electrónico. Hasta los más escépticos preguntaban como por no dejar. Todos preguntaban y todos respondían. Las versiones iban desde el asesinato de un mando policial (remember, el secretario de Gobernación salió de San Luis Potosí cuando lo del avionazo) hasta un enfrentamiento a balazos y asalto a varios bancos. Un viernes que cerró el centro histórico de san Luis Potosí a fuerza de patrullas y soldados enmascarados. Lo cierto es que hubo al menos dos balazos a eso de las 10 de la mañana y un inusual despliegue de vehículos de agentes fuertemente armados. Se cerraron negocios y escuelas.

En la página web del diario Pulso hubo más de 400 comentarios de lectores en la nota principal de este viernes, que fue justamente una desafortunada (por decir lo menos) declaración del gobernador Marcelo de los Santos, que enojado respondió a un periodista: "estamos trabajando (para resolver la inseguridad), ¿qué más quieren?"

Al final, todo quedó, el menos en la versión oficial, en una falsa alarma: una llamada anónima advirtió de dos hombres armados hospedados en un céntrico hotel, y que alguien presionó por accidente la alarma de un banco.

Los rumores surgen ante la falta de información oficial, y las autoridades parecen alimentarlos quién sabe con qué propósito, por interés o por desinterés. Cientos de personas llamaron a familiares y amigos que trabajan en el centro de la ciudad, se habló de un asalto en una plaza comercial y se cerrararon la plaza y el parque del mismo nombre. Hubo miedo. hay miedo aún.

Nada pasó, dicen. Accidentes, hechos aislados, casualidades. El rey se sigue negando a admitir que va desnudo por la vida.