martes, noviembre 10, 2015

Hay que volver a la voz - Oscar Wilde

«Desde que apareció la imprenta y el fatal hábito de la lectura se desarrolló entre las clases medias y las bajas, la literatura ha tendido a apelar cada vez más a la vista y cada vez menos al oído, que es el sentido al que se debería querer complacer, todo ello considerándolo desde el punto de vista del arte puro, y por cuyos cánones de placer debería regirse siempre. […] De hecho, hemos convertido la escritura en una forma de composición musical, para luego tratarla como a un dibujo elaborado. En cambio, los griegos consideraban la escritura una forma más de contar historias. Lo probaban con la voz hablada en todas sus relaciones musicales y métricas. La voz era el medio, y el oído el crítico. A veces me ha dado por pensar que la ceguera de Homero no es sino un mito artístico, creado en tiempos de crítica, que sirve para recordarnos no sólo que un gran poeta es siempre un vidente, que ve menos con los ojos del cuerpo que con los del alma, sino que también es un cantante que construye su canción con música, repitiéndose una y otra vez cada frase hasta encontrar el secreto de su melodía, recitando en la oscuridad palabras que tienen alas luminosas. […] Sí, la escritura ha hecho mucho daño a los escritores. Hay que volver a la voz. Esa es la prueba a superar...»

No hay comentarios.:

Publicar un comentario