jueves, diciembre 31, 2009

Gracias.

No sé cómo llegaron pero si están aquí es porque... ya lo saben, o no, y en todo caso no importa a dónde vayan, la cuestión es que comparten conmigo el té, y la condena del tiempo. Me encantan las coincidencias y más las reincidencias, el azar, el reloj que va marcando lo que sentimos. La vida al otro lado del espejo, al otro lado de la red. Les he tocado y me han tocado, digo, por decir, de alguna manera, me hacen sonreír, reír y me han hecho crecer, reducirme según el instante que se queda prendido, prendado, a mi cabeza. No es fácil seguir esta locura, este cambio de sillas y las tazas sucias, pero a quienes están aquí, que caen sin querer en esta madriguera, gracias.

Tengo el tamaño ideal para una oruga de mi edad, y la sonrisa sin cuerpo, y las palabras. Aunque me corten la cabeza.

Nos leemos, espero, en 2010.
Salud.

Un abrazo.


martes, diciembre 29, 2009

conciso, preciso y maciso

"Tres renglones tachados valen más que uno añadido [...] En esto de la concisión no se trata tan sólo de suprimir palabras. Hay que dejar las indispensables para que la cosa, además de tener sentido suene bien".

Augusto Monterroso

mititos (3)

—Ya estuvo.

—¿Y qué te dijo la Esfinge, Edipo?

—Dijo que por haber adivinado su acertijo me voy a ir a chingar a mi madre...

domingo, diciembre 27, 2009

Otro tiempo - W. H. Auden

Para nosotros como cualquier otro fugitivo,
como las innumerables flores que no pueden enumerar
y todas las bestias que no necesitan recordar,
es hoy donde vivimos.

Muchos intentan decir Ahora No,
muchos han olvidado cómo
decir Yo Soy, y se
perderían, si pudieran, en la historia.

Se inclinan, por ejemplo, con esa elegancia del viejo mundo,
ante una bandera adecuada en un lugar como es debido;
mascullan cual ancianos mientras suben renqueando
sobre lo Mío y lo Suyo y lo Nuestro y lo de Ellos.

Como si el tiempo fuera lo que solían desear
cuando aún estaba dotado de posesión,
como si anduvieran errados
al no desear seguir formando parte.

No es de extrañar, pues, que tantos mueran de pena,
que tantos estén tan solos al morir;
nadie ha creído aún ni apreciado una mentira:
Otro tiempo tiene otras vidas que vivir.

sábado, diciembre 26, 2009

"Greyhound", de Julio Rangel

Desde que se plantó en mitad de la cola, sin importarle que hubiera gente formada antes que él, Humberto supo que Ireneo es lo que se llama un bully, un buscapleitos que se planta donde quiere con una actitud de ¿qué, no les gustó?

Eran las cinco de la mañana y en la estación del Greyhound estaban solamente los pasajeros procedentes de Nueva York en tránsito a Chicago. Formados, esperaban ante la puerta número cinco, mientras en los monitores esparcidos en la estación CNN informaba que a la Primera Dama le habían detectado un cáncer vaginal. ¿O entendió mal? se preguntó Humberto aún adormecido. El volumen de los monitores era apenas un bisbiseo que ambientaba la terminal de Cleveland, con su brillo cromado bajo la luz fluorescente. La cafetería recién abierta hizo que algunos dejaran sus maletas en la fila para ir a comprar un brebaje insípido a guisa de café.

Cleveland, una ciudad como cualquier otra del medio oeste americano, pensó Humberto. Harto de la monótona planicie, prolongada durante horas y horas, punteada regularmente por moteles, billboards y logos de franquicias repetidos hasta la náusea, poco se impresionó con las imágenes de una Cleveland desierta, recién amanecida. Ireneo, en cambio, conoció mejor la ciudad. Hacía ya un mes lo habían enviado de una agencia de restaurantes chinos en Chicago a trabajar acá. La agencia era el centro de una comunidad de restauranteros asentada por la región que enviaba empleados a trabajar como cocineros, camareros o lavaplatos a donde los requirieran. Cuando le propusieron irse a Cleveland, Ireneo se encontraba harto de Chicago, harto del mismo grupo de amigos que se reunía en los bares de La Villita, todos inmigrantes como él, todos trabajadores temporales que lo mismo impermeabilizaban techos que pintaban casas.

Ireneo llegó a la estación un tanto exaltado. Horas atrás había peleado con el hijo del patrón. Muy presumido, me caía gordo, dijo Ireneo a un Humberto resignado a escucharlo. Ireneo se entendía bien con el patrón, un chino viejo de primera generación que apreciaba su capacidad para el trabajo duro en la cocina. El hijo, seguro heredero del restaurante, gustaba de dar órdenes a los mexicanos que se afanaban tras los peroles y se gritaban albures, y aún cuando el junior no entendía una palabra de español, percibía en los trabajadores un código privado, intuía una ironía en su servilismo y, sobre todo, detestaba la música machacona y bronca que escuchaban a todo volumen. Esa noche Ireneo no estaba de humor, y al cerrar el restaurante se hizo de palabras con el junior. En menos que lo cuento, un puñetazo en la cara cimbró el cuerpo del chino, que trastabilló con la nariz sangrante, apoyándose en una mesa mientras los otros empleados contenían a Ireneo, que resoplaba furioso. El junior midió su desventaja física y, sin decidirse a llamar a la policía como primero amenazó, le gritó que se largara, que no quería verlo otra vez allí. Un amigo del trabajo lo llevó a la terminal de autobuses, previa escala en un bar, y allí estaba ahora, tan despreocupado, diciendo que una novia lo esperaba en Chicago desde Noche Buena, pero que a él le daba la gana llegar para año nuevo y otras cosas ante un silencioso Humberto que contaba los minutos para que esa maldita cola avanzara.

Humberto tenía ante sí un largo viaje de costa a costa hasta Los Ángeles. Dada su condición de residente ilegal en el país, y como le habían contado terribles historias de deportación en los aeropuertos, no le quedó más remedio que emprender, con breves escalas, el viaje por la vía terrestre. En California lo esperaba el resto de su familia salvadoreña, su mamá y dos hermanas, dijo, permitiendo por primera vez un atisbo de su vida personal a su interlocutor. —N’ombre —interrumpió Ireneo cuando se enteró de la nacionalidad de su cautivo compañero de viaje– allá en El Salvador los maras están cabrones.

¿Cuántas veces, al decir que es salvadoreño, no había Humberto escuchado el consabido comentario sobre los mara salvatrucha? Ahora Ireneo estaba enfrascado en un largo relato de su amistad con un salvadoreño que vive en La Villita. El hermano de ese amigo está en El Salvador, es miembro del famoso grupo delictivo. Esos no se andan con mamadas, dijo Ireneo con admiración.

En esas estaban cuando la fila milagrosamente se movió. Delante de ellos, el padre de una numerosa familia mexicana entregaba diez boletos al oficial, que no pudo reprimir un comentario en voz baja lleno de sorna ante el chiquillerío con que cargaban en un viaje tan largo.

Humberto buscó la manera de deshacerse de Ireneo, pero éste se le pegó como un enviado del destino para compartir la vastedad del medio oeste, para devorar juntos, con la mirada neutra, las millas que faltaban para llegar a Chicago.



[Desde Chicago, el poeta y cronista potosino Julio Rangel nos envía la primera de sus (esperamos) muchas colaboraciones. Un abrazo, Julio, salud y buenas vibras.] 

jueves, diciembre 24, 2009

ho



Que el fantasma de la navidad presente sonría con ustedes, y el de la navidad futura traiga sólo buenas visiones.

Nos leemos luego.

martes, diciembre 22, 2009

Eusebio Ruvalcaba

"La inspiración surge en cualquier momento, en disímiles lugares. Puedes estar en el atrio de una catedral o en la retaguardia de una manifestación, entre las piernas de una mujer o en el regazo de la madre. En verdad no hay reglas. También puede ocurrir a las seis de la mañana viajando por las vacías arterias citadinas, o a las once de la noche rumbo a Querétaro. El requisito no es ser poeta, ni que la muerte te persiga, ni que odies, bebas o estés enamorado. Sobre esta magia, hay que decirlo, no hay nada escrito".

domingo, diciembre 20, 2009

adelantos de Santa

Pues aún no es navidad, pero ya tengo un libro de Francisco Arriaga, un par de libros del Negro Fontanarrosa que me envió Jesús Olague, un autógrafo de Margo Glantz para mis dos personalidades, que aunque no era la intención me trajo alguien que quiero mucho, y el buen y tapatío amigo Raúl Ramírez García me envió la revista La Rueda, que se edita en su Guanatos, y el libro Fahrenheit 451, de Ray Bradbury.

Todo fluye...

Ah, y en mi trabajo me encomendaron nuevo juguete: 

Justo como la soñaba...

sábado, diciembre 19, 2009

libros navideños


— No me alcanza; me pagará usted otra vez, cuando me necesite por la tarde. Soy del sitio de San Juan de Letrán, número 317 y bandera colorada. Sólo dígame usted cómo se llama...

—Me llamo Santa, pero cóbrese usted; no sé si me quedaré en esa casa... Guarde usted todo el peso —exclamó después de breve reflexión, ansiosa de terminar el incidente.


Santa, Federico Gamboa
(versión digital aquí).

viernes, diciembre 18, 2009

La realidad según don Vlad (1)

"La realidad es un asunto muy subjetivo. Sólo puedo definirla como una suerte de acumulación gradual de información; como una especialización. [...] Se puede ir uno acercando más y más a la realidad, por así decir; pero nunca puede uno acercarse lo suficiente porque la realidad es una sucesión infinita de pasos, de niveles de percepción, de falsos sondeos, y por ende, inextinguible, inalcanzable. Se puede saber más y más sobre una cosa, pero nunca puede saberse todo sobre una cosa: es irremediable. De modo que vivimos rodeados por objetos más o menos espectrales..."

Vladimir Nabokov, Opiniones contundentes.
Entrevista a la BBC, julio de 1962.
(retomada en El lamento de Portnoy)

jueves, diciembre 17, 2009

Agua en los oídos


"Me operaron del oído.

Fui al médico y me preguntó, antes de la operación, 
qué siento en los oídos.

Le dije que siento todo el tiempo 
que mis pensamientos se están duchando".



Tamir, 6 años

En el diario El Porvenir publican ésta y otras entradas de un diccionario escrito en hebreo por niños y para niños, a los que los médicos del hospital Hadassah de Jerusalén agregan a veces alguna información, ilustrando dolencias que padecen, así como tratamientos requeridos.

lunes, diciembre 14, 2009

San Juan de la Cruz, patrono de los poetas




Para venir a gustarlo todo,
no quieras tener gusto en nada.
Para venir a saberlo todo,
no quieras saber algo en nada.
Para venir a poseerlo todo,

no quieras poseer algo en nada.
Para venir a serlo todo,
no quieras ser algo en nada.
..


[San Juan, de Versillos del Monte de Perfección]



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(No todos conscientes, pero ¡cuántos pecados cometen algunos de tus seguidores! De pensamiento y obra, de palabra. Fieles, fanáticos, monaguillos, supuestos monseñores, cada vez más, aunque sepan que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja...

Pero hay lectores, y a esos ahí te los encargo.)




domingo, diciembre 13, 2009

La genialidad de JA Peñalosa

En el diario potosino Pulso, y con el título "Camiones, del albur al debate teológico", el cronista Juan Antonio Hernández nos comparte un hallazgo sobre la obra de Joaquín Antonio Peñalosa, quizá el mejor escritor del siglo pasado nacido en San Luis Potosí.

Juan Antonio Hernández habla de la biblia Picardía Mexicana y la vincula con la historia y los letreros que los conductores, principalmente transportistas, suelen poner en la parte posterior de su vehículo para advertir, hacer reír o alburear a quienes lo vean. Los dejo con la pluma del cronista:

Armando Jiménez, el autor de ese divertimento popularísimo, me confesó en una entrevista que el extraordinario "Soy materialista pero no dialéctico" lo encontró en la defensa delantera de un polvoriento volquete local de modelo sesentero. El uso de esas categorías de El Capital no era ajeno a una ciudad que tuvo sindicatos socialistas entre los panaderos, los obreros de la España Industrial y los cooperativistas de la Fábrica Atlas.
Jiménez tenía entre sus corresponsales más eficaces a monseñor Joaquín Antonio Peñalosa, quien lo dotó de la memorable cuarteta sobre la respuesta que un talentoso versificador anónimo ofreció a la absurda pretensión de la empresa de los Ferrocarriles Nacionales de México de que los pasajeros hicieran del cuerpo en los sanitarios de las estaciones y no en el W.C. de los trenes.
No se sabe si la respuesta la copió Peñalosa en el W.C. del tren o en los sanitarios de la estación local. Personalmente creo que él la fraguó, pues es una cuarteta inteligente y digna de su excepcional sentido del humor:
Me causa mucha extrañeza
este anuncio estrafalario
pues debe saber la empresa
que el culo no tiene horario.

sábado, diciembre 12, 2009

Lupe en San Luis Potosí



A Lupita

Además de que hace 30 años Guadalupe bajó a La Montaña, una conocida cantina de la calle Constitución, gracias a la puntada de un grupo de borrachos y a la ocurrencia del escritor Ignacio Betancourt, hay varios datos interesantes sobre la Virgen de Guadalupe (Lupe, Lupita, Tonanzin, Pita, Coatlaxopeuh...), su santuario y su calzada en San Luis Potosí, que en estos momentos debe estar a reventar en su romería.

Desde hace unos días son cientos los que de rodillas avanzan por la calzada para pagar una manda, con familiares moviendo cobijas delante de ellos para hacer menos pesado el trayecto, en un rito que sólo ellos saben si da resultado.  Son mujeres principalmente, agradeciendo o pidiendo a una madre espiritual... La Calzada de Guadalupe, por cierto, hasta hace poco era la calle de Benito Juárez, paradójicamente.

Obra del ingeniero Felipe Cleere, el Santuario Basílica de Gudalupe queda al sur de la ciudad capital del estado, en línea directa a la catedral (vía la Calzada de Guadalupe y la calle peatonal de Zaragoza, antes calles de La Concepción y la Merced, de las pocas rutas no tan curvas de esta h. ciudad, o quizá ña única recta por haber sido planeada para las procesiones). "A una milla de la ciudad", estaba unida al pueblo (hoy barrio) de San Juan de Guadalupe, "contorno del santuario y administración de la religión seráfica", al que en alguna fiesta dedicaron la siguiente redondilla:


Mi fortuna no te asombre
ni te pasme mi Ventura,
yo tengo a María segura,
pues quiso darme su Nombre.


Según el historiador Manuel Muro Rocha (1839-1911), en su Historia del Santuario de Guadalupe de San Luis Potosí (Tipografía de Dávalos, 1894) el templo se empezó a construir en 1772, gracias a una herencia dejada por cierto ciudadano, y fue "dedicado" (inaugurado) en el año de 1800, con misas en donde uno de los oficiantes fue Miguel Hidalgo y Costilla.

Antes, en el lugar había una ermita, construida hacia 1654 o 1655, con una imagen que trajo de la ciudad de México Francisco de Castro Mampaso, tesorero oficial real de la Caja del Rey, donde en 1771 el clero y el Ayuntamiento declararon a Guadalupe "patrona especial de Aguas, Minas y Comercio".

Para facilitar las procesiones al nuevo templo se tumbaron cercas de las milpas y solares desde el templo de La Merced, que ya no existe y en su lugar está el mercado Tangamanga. Hacia 1831 se plantaron los álamos que bordean la calzada y se colocó la emblemática Caja del Agua, obra del arquitecto Juan N. Sanabria. En 1855 se hizo el embaldosado que a pie o de rodillas, poniendo en riesgo su salud, atraviesan cientos de mandantes en busca de perdón o en oferta de gratitud.

¿No estas aquí tú que eres su madre?

Cohetes, flores, cantos, danza. Muchos días antes, desde antes de que empiece el rosario, muchos pasos, huesos, van hacia el santuario, hacia el lugar de refugio. A veces descreo, a veces me maravillo de esa fe que me es ajena, y sin embargo.

miércoles, diciembre 09, 2009

Ileana Illescas, actriz


La potosina Ileana Illescas falleció este miércoles. Era potosina pues tenía más de 20 años radicando en San Luis Potosí. Recibió el premio como mejor actriz por la Asociación Internacional de Teatro Amateur, y como mejor actriz de reparto en la obra “El hobit”, premiada por la Facultad de Teatro de la Universidad de Houston. Participó en cuatro Muestras Nacionales de Teatro y fue becaria del FONCA.


Según información publicada en elsonido13 Ileana participó en más de 40 obras de teatro. De las que la que más se le recuerdan es el monólogo "La madre pasota", y más recientemente “La Gorda”, ambas del nobel Darío Fo, montajes con más de 100 representaciones. Además participó en el Programa de Teatro Escolar con “Las Niñas de la guerra”.



Participó además en telenovelas como “Cicatrices del alma”, de Televisa, interpretando a Martha, un coprotagónico, como hija de Delia Casanova y pareja de José Elías Moreno, junto a Norma Herrera, Rebeca Rambla y Gregorio Cazal. En el cine se le destaca en la película “Yo no me llamo Javier”, escrita y dirigida por Luzma Guerrero, al lado del actor Roberto Sosa y producida por alumnos de la escuela de Ciencias de la Comunicación (1994), así como una coproducción México-España con Ana Belén llamada “Mis Caribe”. 

Se le rendirá un homenaje este 12 de diciembre en la Plaza Centenario del Centro de las Artes de San Luis Potosí, a las 19:00 hrs., con la participación de Agorafilia, Proyecto Coyote, Proyecto Alighieri, José Antonio Parga, Odeón Círculo Escénico, el poeta y actor Héctor Esquer, grupo de teatro Espacio Vacío y La Carrilla.

(fotos tomadas del sitio del homenaje a Ileana, en facebook)



Aquí un video donde Ileana es un hada, en "Mari Monarca", de Angélica Cortázar, en el teatro de El Rinoceronte Enamorado:

la dicha inicua de perder el tiempo...



En sesión de trabajo, los autores de

Qué chido.



Ya es hora. Feliz cumpleaños, Lupe. Salucita.

martes, diciembre 08, 2009

Primera novela de Socorro Venegas

Gran cuentista, potosina de nacimiento, profesora de literatura, Socorro Venegas presenta en el DF su primera novela, La noche será negra y blanca, con los comentarios de Parra y Chimal. Un festín que ojalá pronto comparta con los que nos quedamos en este desierto.






















miércoles 9 de diciembre a las 19:30 hrs. en el Café-Bar “Las Hormigas”
Casa del joven poeta Ramón López Velarde
Álvaro Obregón 73, colonia Roma, ciudad de México

lunes, diciembre 07, 2009

mititos (2)

No hacían falta las palabras. Lo siento, no tengo la culpa de que hayas comprobado lo que todos decían de ti. Yo sólo alce mi escudo como defensa. Es la realidad la que te ha petrificado y te ha mostrado lo que eres.

Tal vez por eso dicen que un imagen dice más que mil palabras, monstruo.

domingo, diciembre 06, 2009

mititos (1)

Bien, ya que has demostrado tanto amor, puedes marcharte del infierno, los dioses lo permiten, vete y no vuelvas jamás. Hay un sola condición, que en el camino al exterior no puedes volverte a mirar al objeto de tu deseo o todo lo perderás.



Anda, anda y no voltees a ver el espejo, Narciso.

para un domingo relajado



"Hasta el fin"
Chico Buarque

viernes, diciembre 04, 2009

¿San Luis Potosí es uno de los dos estados más racistas de México?

Leo De refranes y cantares tiene el pueblo mil millares. I. Refrán mexicano y discurso: tipología, campos y estructuras recurrentes en el universo de la oralidad, de Josefina Guzmán y Pedro Reygadas, publicado por El Colegio de San Luis y la Universidad Autónoma de San Luis Potosí en junio de 2009.

Amén de una interesante "tipología de los géneros cortos de la oralidad" (refranes, sentencias, máximas, trabalenguas) los autores clasifican los refranes (sobre todo) mexicanos en campos semánticos (mujer, indio, pendejo, dios, saber, agua...) y nos presentan las estructuras recurrentes: "más vale... que...", "cuando...", "donde...", "el que...", "lo que...", "no hay...", "quien...", "como...", "para..." y "para que...".

En el campo semántico "De la mujer" no parece muy académico que recurran a un correo que estuvo circulando por Internet sobre si el español es sexista (ilustrado con Mafalda y Lucy de Peanuts, con definiciones masculino-femenino donde todo lo femenino es "puta": zorra, regalada, ligera, ambiciosa, aventurera, cualquiera, bicha, perra...). Falta también la significación sexista entre hombres: como dicen en La ley y el orden: "la violación no es asunto de sexo, sino de poder y furia" (en este caso verbal).

En la parte que Guzmán y Reygadas dedican al campo semántico "del indio", con las obvias cargas de poder y desprecio en los refranes, llama la atención, por una parte, que no hacen referencia a los términos teco o naco, tan extendidos no sólo entre las clases "altas", gracias entre otros al Pirrurris, el personaje de Luis de Alba. Por otra parte, es llamativo el siguiente párrafo:

Y el estereotipo genérico encuentra su especificidad. Por ejemplo, en San Luis Potosí, uno de los estados más racistas de México junto con el Chiapas prezapatista, al tonto se le dice "pamito" (de pame, nombre impuesto a los Xi´oi).

Me cai que no es que niegue la mochería de mi ciudad o de mi estado (donde el lunes siempre la nota de ocho es la opinión del arzobispo u otro vocero de la iglesia católica), ni que no haya visto síntomas de racismo, homofobia o sexismo, pero ¿neta? ¿Sólo nos podríamos comparar con el Chiapas prezapatista? En Chiapas postzapatista me consta que muchos siguen diciendo de alguien distraido (que no necesariamente "tonto", término que también habría que ver en su carga de subjetividad) que "viene de chamulandia", pero nunca había oído eso de "pamito", no sé si haya quien lo dice en algunas zonas del estado.

Así como al fanatismo de cualquier tipo, le tengo miedo a la ultracorrección del lenguaje, a la manía de etiquetar todo por unos cuantos (léase la frase que pongo en mi perfil bloguero, por favor). Que San Luis Potosí tiene fama de una ciudad mocha y persignada, la tiene merecida, pero espero que esté cambiando, creo que está cambiando. Y llamar racista a todo el estado cuando los huastecos se enojan si les llaman potosinos, por asumirse diferentes, es una prueba.
Tal vez sin aparente sentido relaciono esto con las recientes polémicas albureras (que no poéticas) en la república de las letras (je, con todo y sus juanitos). No es por echar más leña al fuego, de verdad tengo la duda, ¿es válido hablar de homofobia cuando al otro se le insulta nomás por joder? El mal gusto es innegable, pero acusar de prejuicio es otro ataque, creo, cuando se trata de insultos y fintas, de una competencia real o imaginaria. En alguna página polar he leído insultos versificados contra una funcionaria cultural, ¿ya por eso el sarcasmo se vuelve sexismo? Cuando se ataca a un escritor (o escritora, no me vayan a acusar de omisión) por huevón, lambiche o convenenciero, ¿debo sentirme aludido? Si alguien me dice puto o pendejo mi reacción dependerá del momento histórico y del emisor. Sé que no será por homofobia o racismo.

Los que más critican la intolerancia suelen ser los más intolerantes: si no estás conmigo estás contra mí.

Da escozor, aunque en eso va el refrán, retoman los autores, pues es (según Shipley, 1962), "un lugar común con pretensiones de validez universal". Tienen toda la razón.

"Te lo digo, Pedro, para que lo entiendas, Juan".

jueves, diciembre 03, 2009

¿Alguien me puede becar con 160 mil dólares?

 "Una copia del libro A través del espejo, y lo que Alicia encontró ahí (Through the Looking Glass, and What Alice Found There, o Alicia a través del espejo) que perteneció a la niña que inspiró a Lewis Carroll para escribir Alicia en el País de las Maravillas será subastada el 16 de diciembre.




(ilustración: JA Miller)

"La primera edición firmada, una secuela de Alice In Wonderland, de 1865, perteneció a Alice Liddell y y tiene un precio estimado en $150,000 dólares.

"Los lectores de Génesis recordarán el primer libro de Alicia "bajo tierra", que se reprodujo en facsimilar en una edición limitada de 150 ejemplares, completamente ilustrado y escrito a mano".



(sí, 10 mil son para ir a recoger el libro y para gastos de papelería)


miércoles, diciembre 02, 2009

Monsi dixit:

Lo que se dice para llamar la atención es cada vez más acre, más agudo, a veces más chirriante, y lo que vemos es un duelo de estrépitos a propósito de circunstancias que a veces requerirían un poco más de serenidad. Hay más crítica que nunca, pero como nunca, la crítica no tiene resonancia. De hecho, la opinión pública es el conjunto, en gran medida, de impotencias que siguen a la impunidad. Sólo de vez en cuando se logra que la opinión pública modifique algo, que haya una caída o que detenga un proceso. En general, la opinión pública es un coro griego de otro drama. La época del escritor como profeta ya pasó.